Hay una duda que me
aqueja desde hace rato. No hay caso, por más que me esmero. Cada vez que
alguien me lleva en coche junto a otras personas no logro dilucidar lo
siguiente:
¿Cuál es el procedimiento
mediante el cual, dado un grupo de digamos 4 pasajeros, se designa aquél que
viajará sentado junto al conductor del auto?
- ¿La tía más vieja?
- ¿El amigo más gordo?
- ¿La mina más buena?
- ¡¡¡¿Quién?!!!
El que menos borracho esté para poder ir hablándole al conductor y que no se quede dormido.
ResponderEliminarpregunta facil: el que grita 'SHOTGUN'!
ResponderEliminarni idea del origen de esa costumbre, la vi en una serie comica inglesa que se llama the inbetweeners. se trata de cuatro estudiantes de secundaria virgenes losers que intentan ponerla a toda costa y nunca pueden los pobres..
en un par de pelis tambien lo vi eso, es inquebrantable.
Va adelante el que sepa a donde hay que ir, y si está buena, mejor :)
ResponderEliminarEl acompañante (que bien suena, podría ser una película o una novela) tiene que ser siempre el que: o sabe cómo ir a donde hay que ir; o bien está atento a ciertas cuestiones. Como saber interpretar un mapa (hoy: manipular un gps), saber cebar mate en movimiento, y estar atento a imponderables. En fin, el acompañante debe ser un Buen Copiloto. Sino andá a tras, es preferible ir de "remis" que ir con un/una comecocos.
ResponderEliminarYo voy hablando para que no se duerma...aunque algunas veces misteriosamente me dicen que no use cinturón y se dirigen derecho hacia un árbol...
ResponderEliminarEl que tenga menos miedo a salir por el vidrio en caso de choque... sinó la abuela, que ya vivió demasiado.
ResponderEliminarNi idea. A mí me gusta ir atrás en un rincón y en lo posible que en el auto no hable nadie. Necesito un psicólogo urgente que me explique por qué mierdas no soporto, detesto y me inflan todas las capas epiteliales que hablen en el auto. Es hermosa esa foto hermosa. Cashhate.
ResponderEliminarSaludos van, Vale
Uh me pasa lo mismo... pasame el dato de ese psicólogo (por lo de hablar en el auto). Salutes
EliminarEva: Me encanta porque vos asumís que volvemos de una fiesta o joda alcohólica. Qué divina.
ResponderEliminarCerebrito: Nunca había escuchado sobre eso. ¿Qué pasa si nadie quiere ir adelante? ¿Qué gritamos? Enseñame, dale que vos estás más actualizado.
Dan: Apa, cuántos requisitos. No hay mucha gente que califique entonces :S
si es un taxi, el que va adelante es el pelotuido que paga.
Eliminarsi es un auto particular, siempre hay un salame que le pinta ir de copiloto.
O sea que en taxi no conviene... Voy anotando...
EliminarBigote: Entonces hay que empezar a tomar examen de ingreso para ese puesto, che. Guarda.
ResponderEliminarMe encantó el título para una película, o mejor: una saga tipo "El Padrino". "El Acompañante I, II, y III". Camino al Oscar, ojo.
Scabbers: Veo que tenés experiencia como acompañante. ¿Sos una tía vieja?
Manco: Jajajjaja! ¡Pobre la abuela!
Sandra: A mí también me gusta ir atrás. Lo que pasa es que a veces me toca ir adelante y como no entiendo el criterio de selección, me cayo y voy. Por eso estoy aquí trasladando mis inquietudes acompañantales a mis queridos y respetables entendientes.
¡¡¡GRACIAS!!!
¿Cómo tia? Tio puede ser (incluso primo, cuac) pero que me cambian la identidad de una, por favoooor XD
ResponderEliminarHablo para que aceleren y me dejen rápido :)
En automóviles particulares, y viajes cortos, la persona que va adelante suele ser la más cercana (emocionalmente) al conductor. Esto también está correlacionado con que es mejor que sea quién baja último, así que cuando vuelven de algún lugar, si hay convivientes del conductor lo más probable es que uno de ellos sea quien viaje adelante.
ResponderEliminarEn viajes un poco más largos, hay que tomar en cuenta otras consideraciones:
1. Largo de piernas.
2. Habilidades matísticas.
3. Sentido de la ubicación (geográfico)
Y en viajes aún más largos, con paradas, lo más probable es que se rote esa posición, y también la de conductor.
En un taxi, el menos chusma, porque se pierde la conversación de atrás.
ResponderEliminarScabbers: lo de tía era por mi lista de criterios. Está bueno eso, lo vas guiando para que te dejen primero a vos ;)
ResponderEliminarAure: Ah pero ésta ya es una clasificación profesional del acompañante. Espero que no cobres caro.
USB: Tal cual, o se tiene que andar dando vuelta y preguntar Qué, qué?? No da. Buen punto.
Gracias :)
Sí, la re veo eh: El acompañante, la saga! Posta!
ResponderEliminarComparto también lo de aurelianito, lo de la cercanía (emocionalmente) al conductor.
quien tenga más tetas
ResponderEliminarVale:
ResponderEliminarVengo desde el blog de Sandra, atraído por un aromita a lasagna...
Como no encontré nada, me vuelvo en el auto; curiosamente, recuerdo los consejos que en cierta oportunidad me alcanzó Atanasio Rafaña, respecto a cómo proceder en casos como el que citás. Existen diferentes posibilidades, según me instruyó, textualmente:
"Si son los vagos de siempre, el último en bajar ocupará la butaca del acompañante y los restantes, estarán tan cerca de la puerta trasera derecha, como sea el orden de bajada del vehículo.
Si es mi familia, me acompañará mi esposa y atrás irán mi hija y mi madre, que estará en el lado derecho.
Si es un grupo de matronas con sus críos chillones, junto a mí se ubicará aquella que se muestre más callada, el cotorrerío irá sentado atrás y a los niños se los apilará en el baúl.
Si fuera un grupo de jubilados, se distribuirá la carga de acuerdo a su peso, de modo de no recargar la suspensión trasera del vehículo, si fueran escuálidos y decrépitos, se procederá del mismo modo que con los vagos (ya descripto).
Si fuese un grupito de maestritas rurales, que hacen dedo en la ruta, el asiento del acompañante será siempre -siempre- para las más agraciada de entre todas ellas.
Si los candidatos a pasajeros viviesen en la localidad de "donde el Diablo perdió el poncho", es seguro que el vehículo no arrancará y se deberá llamar a la grúa y tendré que quedarme a esperar a que... se vayan.
Si viene la rubia pechugona de minifalda, está asegurado su lugar de acompañante; siempre y cuando sean hasta tres acompañantes. Si vinieran cuatro acompañantes, la rubia cederá su lugar de privilegio a aquella persona más obesa o de mayor edad; entonces, ella se sentará en el asiento trasero, en el medio (justito- oh, casualidad- donde enfoca el retrovisor).
Si entre los candidatos a viajar se cuela un cura, se simulará que el auto necesita un empujón para arrancar; tras varios intentos fallidos, el vehículo arrancará el motor solo cuando el clérigo se vea exhausto (no hay nada más endemoniado que un coche)."
Y las posibilidades se tornan numerosísimas, por lo que dejo solo estos pocos ejemplos, que espero te ilustren suficientemente.
Saludos.
Sin dudas la que está más buena
ResponderEliminarante un empate la de mejores pechos, el culo no cuenta en esta situación
Si son hombres y el viaje es largo debería ir el de mejor gusto musical
Juanita: No conozco a nadie que tenga más de dos. (¡Cuak!)
ResponderEliminarArturo: ¡Bienvenido! Agradezcale entonces de parte nuestra al Sr Rafaña por compartir tan completo catálogo con nosotros :)
Cosme: Bien ahí lo del busto musical, digo lo del gusto musical.
¡Gracias!
En los hombres, va el que la tenga menos larga, por ende es el más responsable del grupo (sazonar con (?) a gusto).
ResponderEliminarEn las mujeres, la de mejores tetas, casi obvio es esto. Si hay dos que tienen muy buenas tetas, una alternativa a la elección es la que tenga mejor lapiz labial. Otra alternativa es verificar cual de las dos tiene las tetas más paradas. Lógicamente la que tenga las tetas más paradas es la elegida.
En la familia, la persona que putee menos.
Besos.